El Concejo Deliberante, bajo la presidencia de Sandra Trigo (presidenta provisoria), realizó hoy su sesión especial N°3 y última del año en curso, en la que dio aprobación final al paquete económico municipal 2026 (Presupuesto, Código tributario y Ordenanza Tarifaria), a 12 Convenios Urbanísticos y también ratificó la creación de la Comisión Tributaria Intermunicipal Permanente (CTIP), entre los municipios de Córdoba, San Francisco, Villa María, Alta Gracia y Río Cuarto.
Los mencionados convenios con desarrollistas incluyen un área total de 90 hectáreas y apuntan a promover el completamiento de vacíos urbanos, consolidación urbana en el límite del área rural y urbanizable, y densificación y provisión de usos mixtos.
En todos los casos, pasaron por la instancia de audiencia pública, que es una exigencia novedosa para este tipo de acuerdos que la ciudad realizada hace ya más de una década.
Pedro Altamira (HUxC) fundamentó que se trata de “transformaciones urbanas relevantes”, que ayudan a ordenar el crecimiento. “No son hechos aislados: promueven una ciudad más integrada y compacta”, señaló. Luego detalló ubicación, características, superficie y beneficios tanto urbanos como económicos que producirá cada uno de los proyectos.
Los recursos generados por plusvalía que quedarán para la ciudad a raíz de estos 12 convenios están estipulados ya en montos, forma y plazos de pago: serán casi $6.000 millones, que el municipio recibirá en su mayor parte a lo largo de 2026.
El concejal Martín Simonian recordó que estos acuerdos no suponen que de inmediato se iniciarán las obras propuestas. “Son estudios de factibilidad. A partir de las exigencias técnicas que ponga la Municipalidad y de su cumplimiento efectivo por parte de los privados, se verá si los convenios llegan a buen puerto”, aclaró.
Desde la UCR, Elisa Caffaratti (UCR) reivindicó a los convenios como “una herramienta válida y mejorable”, pero cuestionó que los 12 acuerdos se voten en el Concejo en la última sesión, en paquete, y pese a que “hay informes técnicos que mencionan problemas viales, de anegamiento y ambientales” en los terrenos en cuestión.
Ese bloque se abstuvo de votar, lo mismo que Soher El Sukaría (PRO) y Jéssica Rovetto Yapur (Cordobeses por la Libertad).
Graciela Villata (Frente Cívico) criticó que “no hubo participación de los vecinos” en la audiencia pública y también la falta de un plan director previo que establezca, desde el Estado, hacia dónde debe ir la ciudad. El juecismo rechazó los proyectos, lo mismo que la concejala Virginia Caldera (FIT).
Presupuesto
El paquete económico fue votado favorablemente por el bloque oficialista y el edil Gabriel Huespe (Ciudadanos), mientras que la UCR y el Frente Cívico rechazaron el presupuesto y el Código Tributario pero acompañaron, en cambio, algunos aspectos de la Tarifaria, especialmente la baja de la presión fiscal. Virginia Caldera y Rovetto Yapur votaron en contra todo el paquete.
El presupuesto proyecta ingresos y egresos por $1,48 billones y marca un equilibrio (sin déficit) después de 7 años de saldo negativo.
Miriam Aparicio (HUxC) destacó eso, además de la rebaja del 30% en los impuestos al comercio e industria. También valoró que las calificadoras de riesgo describen como fortalezas de la ciudad su bajo nivel de endeudamiento y el esfuerzo por reducir gastos.
Su par Martín Simonian calificó de “histórica” la reducción a cero del déficit, más aún “en este contexto de retracción económica y corte de recursos nacionales”.
Desde la UCR, Javier Favre objetó que el ajuste se hizo “restringiendo el músculo municipal, como lo son las obras, y no sobre la grasa excedente del Estado”, como lo serían a su juicio los gastos en propaganda, las estructuras duplicadas y la desmedida planta de personal.
Graciela Villata (Frente Cívico) rechazó la continuidad de la emergencia económica y contrastó esa decisión con los indicadores favorables de las calificadoras de riesgo. “Si el intendente quiere tomar deuda, que venga acá a pedir autorización”, desafió.Finalmente, Soher El Sukaría celebró la menor presión fiscal, pero dijo no entender cuál es el rumbo de la ciudad. “Este presupuesto no tiene sentido, si con la vigencia de la emergencia les alcanza una firma para cambiar las partidas”, advirtió.
