Con la presencia del viceintendente Javier Pretto, hoy se reunió por primera vez la Comisión Especial de Análisis y Adecuación del Código de Convivencia Municipal, para empezar a debatir la reformulación de esa ordenanza. El grupo de trabajo quedó conformado de la siguiente manera: Nicolás Piloni (HUxC), presidente; vicepresidente, Javier Favre (UCR); secretaria, Graciela Villata (Frente Cívico), además de representantes de todos los bloques políticos.
En la oportunidad, se convocó al Dr. Juan Manuel Araoz Ortega, Administrador General de la Justicia Administrativa Municipal de Faltas, y los funcionarios de esa repartición Lucas Carpio, Ignacio Fragueiro, Ignacio Pernía y Virginia Santos, para que trazaran un panorama sobre la aplicación del Código vigente.
El viceintendente Pretto dijo que la idea es reformular el Código bajo los conceptos de “participación y convivencia” y convocó a que se involucren “los ciudadanos y todos los actores relevantes, para tener un debate amplio”.
“Más allá de que es una norma técnica, se nutre de la realidad. Está bueno escuchar la realidad que manifiestan todos, para tomar nota de las preocupaciones y buscar la mejor manera de lograr una convivencia armónica”, insistió.
A continuación, Aráoz presentó un informe preliminar, con algunos ejes como disparadores del debate que se inicia. “Será un trabajo complejo, difícil. Tenemos que interpretar la Córdoba de 2025 y lograr coherencia jurídica para un Código sostenible. No hay apuro en sacarlo ya, porque tenemos un Código vigente. Los jueces son quienes lo aplican a diario y con ellos hemos relevado la situación actual. Hay superposiciones con otras normas, artículos que nunca aplicaron”, explicó.
Entre otras, mencionó estas cuestiones a considerar:
Revisión. La tecnología ha modificado hábitos y la forma de pararse frente a ellos. Por ejemplo, en el auto, el celular antes se usaba solo para hablar, pero ahora está el GPS, imágenes, reproducción de música. Un tema a debatir es si slo se lo puede utilizar con el auto detenido.
Alcance. Una idea central es que el futuro Código tenga proyección metropolitana, hacia el Gran Córdoba, al menos en sus principios básicos.
Participación. Tiene que ser lo más amplia posible para que los vecinos se apropien del ordenamiento; si no, puede ser letra muerta.
Sistematización. Hoy hay mucha dispersión de normas. Se busca que todo lo sancionatorio se concentre en un solo lugar, de manera clara y precisa.
Impacto digital. La gestión de cada acta en la Justicia de Faltas ya es digital. La tecnología permite intensificar los controles y mejorar la transparencia, mediante la trazabilidad y velocidad en cada intervención.
Procedimiento. Se propone generar alguna instancia de fiscalía de investigación administrativa, dónde los vecinos puedan denunciar. Hoy, todas las actuaciones se generan desde la confección de un acta.
¿Detención?. Hoy el Código tiene una decena de sanciones posibles. Se evalúa incorporar la detención o arresto por hasta 15 días, como vía para modificar conductas en casos graves.
Simplificación. De los 289 artículos del actual Código, 245 son sancionatorios, pero 41 de ellos no se aplicaron nunca; en otros 48, hubo menos de 10 actas y en otros 42, menos de 100 actas. Se pretende ir hacia un régimen más preventivo.
Sobre este último punto se mencionó una estadística favorable: en el control de baldíos y basurales, cuando se intima, en el 85% de los casos los infractores corrigen la situación en un plazo de tres días.
“Hay herramientas para corregir conductas y que no cometan la infracción. Queremos un cambio de paradigma, dejar lo sancionatorio e ir más hacia lo preventivo”, graficó Aráoz.