El ex Instituto de Córdoba y Juventus de Italia, trabajó a contrarreloj en la previa del campeonato del mundo como consecuencia de una lesión muscular que puso en duda su convocatoria.
Finalmente, fue convocado por Lionel Scaloni y sumó un total de 18 minutos (17 ante Croacia en semifinales y 1 en la final). Dybala participó en un quite providencial ante el delantero francés Kylian Mbappé en la última jugada de la gran final y marcó en la tanda de penales que finalizó 4-2 a favor de la Argentina, para conquistar su tercera estrella mundialista.
En forma de agradecimiento, el cordobés donó su medalla de campeón del mundo a la Roma de Italia, club donde milita en la actualidad y que le permitió trabajar con tranquilidad para poder llegar en condiciones la cita más xima del fútbol mundial.
“Paulo Dybala ha confiado su medalla de Campeón del Mundo al Archivo Histórico del Club”, publicó la institución italiana en su cuenta oficial de Twitter con una foto del propio Dybala y la presea dorada.