El 25 de noviembre de 2020 murió Diego Armando Maradona, y hoy se cumplen cinco años de aquella jornada que marcó para siempre al mundo del fútbol y a millones de Argentinos.
Su partida generó una conmoción global: desde Nápoles hasta Buenos Aires, desde Barcelona hasta escenarios remotos donde su nombre era sinónimo de magia, pasión y rebeldía. Maradona trascendió las fronteras del deporte para convertirse en un símbolo cultural, un ícono popular y un referente emocional para varias generaciones.
Cinco años después, el recuerdo sigue intacto. Se lo evoca en cada potrero donde un chico intenta imitar “la gambeta”, en los murales que lo muestran con los brazos abiertos, en los estadios que aún celebran sus hazañas. Su figura continúa dividiendo opiniones, pero nadie puede negar su influencia descomunal: Maradona fue talento puro, corazón ardiente y una historia marcada por luces y sombras.
Su legado deportivo permanece en goles eternos, como el “Barrilete Cósmico” del ’86, y en la forma en que logró unir a un país detrás de una camiseta. A cinco años de su muerte, Diego sigue vivo en la memoria colectiva, convertido en mito y leyenda. Porque, como muchos dicen, Maradona no se va: se queda para siempre.
Por: @carolinaforchino
