La noche del 5 de noviembre quedará grabada en la memoria del fútbol argentino. En esta fecha, Independiente Rivadavia de Mendoza logró un hito histórico al conquistar por primera vez un título nacional: la Copa Argentina. El equipo mendocino, conocido como “La Lepra”, escribió una de las páginas más emocionantes de su centenaria historia, coronando un camino de esfuerzo, humildad y pasión.
A lo largo del torneo, Independiente Rivadavia superó a rivales de todas las categorías, demostrando que el corazón y la entrega pueden más que las diferencias presupuestarias. Su consagración fue el reflejo de un grupo unido, de una provincia que soñó con ver a su equipo levantar un trofeo grande y lo logró.
El título no solo significó una alegría inmensa para Mendoza, sino también un ejemplo de superación para el fútbol del interior, que muchas veces lucha contra la centralización de recursos y atención. La Lepra mendocina, con su victoria, reivindicó el valor del trabajo colectivo y del amor por los colores.
Esa noche del 5 de noviembre quedará como el día en que Independiente Rivadavia se consagró campeón al derrotar por penales a Argentinos Juniors en el estadio de Instituto Atlético Central Córdoba, llevando la gloria a todo Cuyo.
Por: @carolinaforchino